• Importante fuente de proteínas

Las proteínas son unos macronutrientes imprescindibles dentro de cualquier dieta saludable. Son necesarias para el correcto desarrollo y recuperación de elementos como músculos y tejidos, así como para mejorar el transporte de ciertas sustancias en sangre, como minerales o lípidos.

Los embutidos curados al estar elaborados con carnes de cerdo poseen una gran carga proteínica de gran calidad. Esto lo convierte en un alimento muy adecuado para recuperar energía al hacer actividades físicas.

• Fuente de vitaminas

Los embutidos curados son un importante aporte de vitaminas del grupo B, entre las que destacan:

Vitamina B 1: Favorece el funcionamiento del corazón.

Vitamina B3: Ayuda a disminuir la fatiga y el cansancio.

Vitamina B12: Facilita la formación de glóbulos rojos y fortalece el sistema inmunitario.

El aporte de este grupo vitamínico colabora a que nuestro metabolismo se mantenga en niveles correctos y equilibrados.

• Minerales

Los embutidos curados son ricos en minerales como zinc, hierro y fósforo.  El hierro contribuye a desarrollar la función cognitiva y el fósforo es fundamental para el fortalecimiento y crecimiento de dientes y huesos. Por eso, hay que destacar que los embutidos curados son un alimento muy adecuado para etapas infantiles, pues ayuda a un correcto crecimiento y desarrollo.

• Grasas insaturadas

Como hemos comentado al principio, uno de los mitos en torno a los embutidos curados es la cantidad de grasa. Pero es importante señalar que las grasas presentes en este alimento son las pertenecientes al grupo de grasas insaturadas. Es decir, las denominadas “grasas buenas”.

Estas grasas ayudan al cuidado de nuestro sistema cardiovascular.